Me he decidido a decir estas palabras porque es posible que a alguien le sirvan.
El estallido social en el que estamos inmersos, tiene una multiplicidad de lecturas, sociales, económicas, emocionales y espirituales y sin duda todas tienen razón en sus miradas diversas, porque la realidad que es inasible para nuestra limitación humana, siempre es más compleja que la de nuestra particular percepción individual.
Desde mi sentir, nuestro país es como un adolescente que termino el transito hasta llegar al límite que lo acerca a la adultez, los 18 años, edad en la que las leyes le dan derechos y deberes en la sociedad que habita. Pero este adolescente viene de un hogar disfuncional, en el cual no tuvo lugar para expresarse, fue discriminado por diversas causas, sufrió bullyng y tuvo padres castigadores, prepotentes que lo golpearon y que no generaron lazos afectivos como los que necesitó para formarse seguro de que lugar ocupar afuera. Fue tanto lo que sufrió que llego un momento en que lo único que quiere es ser adulto para irse, y se va de casa!… Pero sale y no sabe dónde ir, ni sabe qué hacer con su vida porque tampoco le mostraron sus potencialidades ni le entregaron muchas herramientas. Esto hará que este joven salga a la vida con rabia y se pase un tiempo emborrachándose y peleándose con todo el mundo hasta que saque su rabia y su dolor, pero demorara mucho más en encontrar sus propias habilidades y pueda decir “quiero esto para mí, por estas razones” ….y se demorara mucho más todavía en encontrar el «sentido de su vida», es decir, ¡saber para que esta en este mundo! y ¡que le corresponde hacer por los otros!….
Cada uno de nosotros, es un fractal de la sociedad que habitamos, esta sociedad occidental que se ha fundado sobre los paradigmas del TENER, y del HACER para TENER. Paradigma que nos han llevado a la depredación de la tierra y de los más débiles y estamos ad portas de una 6ª extinción sin que lo sepamos.
Hace años atrás hacia clases en la Universidad, sobre Ecología del Desarrollo Humano, en las Escuelas de Ingeniería, de Diseño y de Educación de la UTEM y hablaba justo de esto. De la necesidad del cambio de paradigma mecanicista que aun sostenemos como sociedad y que nos ha llevado a este culto al Consumo y al “tener” y “tener” hasta un extremo vomitivo, vomitivo porque acumulamos cosas en forma mecánica y anti biológica sin darnos cuenta.
Esta necesidad de cambiar al paradigma de SER!.. SER.., SER, concentrarme en eso, solo ser, aceptar quien soy y no gastar mi vida entera aparentando quien ¡No soy!… eso es lo que nos llevara a un nuevo modelo de sociedad, pero eso cuesta verlo porque es invisible, los paradigmas son invisibles.
Lo que está sucediendo afuera en la sociedad chilena es lo que está sucediendo adentro de cada uno de nosotros en lo más profundo de nuestro inconsciente.
Qué proporción de chilenos siente que sabe para que esta viviendo? El 10%, el 5%, yo creo que si acaso el 1%. La gran mayoría vive como un robot trabajando como animal para llegar agotado a su casa y no tener energía ni ganas de compartir “calidad de vida” con sus más cercanos y lo único que aspira es a evadirse de su mísera vida mirando cualquier cosa en la pantalla de enfrente.
Para eso vives? Para producir, comprar lo que no necesitas y hacerte viejo en esa alienación?.. y están los otros, los que son mayoría, los que tienen hambre, los que no les alcanza para lo más básico y que no pueden reflexionar en nada porque toda su energía se va en la subsistencia más primaria y más deshumanizada y ha sido así por generaciones… y además porque esa persona mira a los primeros envueltos en su oropel y no teniendo otro modelo, aspira a ser como ellos.
Hay un porcentaje que estamos agotados de lo superfluo, de lo banal, de lo vacío de lo sin sentido y que si hemos encontrado una razón para vivir y si sabemos para qué estamos aún en este planeta y que si nos importa que podamos aprovechar este vomito social, para luego hacer las cosas mejor de lo que las estábamos haciendo.
Todos somos responsables y para eso la invitación es a que nos miremos adentro y revisemos: ¿se exactamente lo que quiero para mi vida?… (muchos dicen quiero ser feliz, …eso es una generalidad que no dice nada…tendrías que 1º definir qué es ser feliz para ti y si te lo preguntas realmente te puede sorprender la respuesta), ¿se “para que” estoy viviendo?, se cuáles son mis propias injusticias, mis propias inequidades, mis propias exclusiones y marginaciones y también se cuáles son mis rabias acumuladas que salen como agresión a los otros? y finalmente ¿Como me propongo sanar todo esto para ser una mejor persona y por lo tanto un mejor ciudadano?.
Cuando todos seamos capaces de contestar estas preguntas, la sociedad sabrá que hacer y qué modelo nuevo de vida construir, modelo que claramente no es conocido aun porque como células de ese cuerpo social, cada uno de nosotros, todavía no lo tenemos claro el Sentido de nuestras Vidas…, porque ¡una sociedad está enferma cuando el conjunto de sus componentes lo está! y el 1er paso para cambiarlo es reconocer que todo esto que vemos afuera, está en nosotros mismos.
MARÍA AMALIA JERIA
